Casablanca.com

Desde su mismo título, WWW. What a wonderful world, segundo largometraje del director marroquí Faouzi Bensaïdi, parece reivindicar como territorio propio la disolución de fronteras de los entornos virtuales: desconcertante, arriesgada, formalista, estimulante y fallida, la película puede interpretarse como la deliberada huida de unas señas de identidad culturales, o bien como la reivindicación de una imagen de Casablanca como la puesta al día de esa encrucijada que ya fue en el clásico de Curtiz. En este caso, Casablanca es una manifestación particular de esa redefinición del mundo como zona de tránsito, cruce de géneros, colmena de incomunicaciones interconectadas y campo de juegos del azar.

What a... tiene algo de fastidioso ejercicio de chico listo, empeñado en hilvanar guiños y referencias antes de articular una voz propia, pero también revela un placer por la narrativa sofisticada y un evidente control del encuadre y el ingenio visual. Es una película que tanto puede sonar a Guy Ritchie como a Jean-Luc Godard, a Wong Kar-Wai o Jacques Tati, mientras cruza las trayectorias de un hierático asesino a sueldo, una guardia urbano escasa de afecto, un joven dispuesto a cruzar el Estrecho, una prostituta pluriempleada y la esposa de un militar. Bensaïdise revela como un autor heterodoxo al que convendrá seguir.