Tres jueces para instruir la causa en sólo diez meses

La compleja instrucción del caso Hidalgo contra el blanqueo de capitales en la Costa del Sol acumula ya tres jueces instructores, y en breve llegará el cuarto magistrado. El juez suspendido Francisco Javier de Urquía comenzó la operación policial el pasado abril. Tras ser apartado del juzgado por la Comisión General del Poder Judicial (CGPJ), le sustituyó el magistrado Manuel Martín Hernández-Carrillo. Debido al sumario tan abultado que manejaba, con 70 tomos hasta el pasado diciembre, Martín contó con la ayuda del juez Francisco García Valverde. Martín Hernández Carrillo le dio el mayor impulso al caso y la instrucción avanzó a gran ritmo, pero regresó antes de las pasadas navidades al Juzgado de lo Social 2 de Marbella.

A comienzos de año el juez Ricardo Puyol retomó el sumario en comisión de servicio, que finalizará en breve porque ha sido nombrado juez titular del Juzgado número 1 de Marbella. Llegará entonces el cuarto juez, que aún debe ser propuesto por el Tribunal Superior de Justicia (TSJA) al Consejo.

Fuentes judiciales confirman que la instrucción está "muy avanzada" después de que hayan transcurrido sólo diez meses desde que arrancó el pasado abril. La magnitud de lo incautado en la operación Hidalgo supera a lo intervenido en el caso Ballena Blanca, la otra gran operación policial contra el blanqueo de capitales. Entre los bienes intervenidos hay 92 millones de euros, 553 viviendas en las zonas de más cotizadas de la Costa del Sol, y 60 automóviles de lujo, además de numerosas joyas.