Nuevo colapso en la UCI del hospital de Pontevedra

"Ya no pueden más". Con estas palabras sintetizaba ayer el sindicato CIG la situación "límite" que se está viviendo en el hospital Montecelo de Pontevedra y, en particular, en el servicio de Urgencias. Alrededor de 50 personas, entre personal y afectados, protagonizaron a media mañana un paro para exigir soluciones a la Consellería de Sanidade y a la gerente del centro, María Codesido, a quien acusan de "despreciar y ningunear" al personal.

De nuevo, aunque en esta ocasión no podrá achacarse a un "repunte epidemiológico", 12 pacientes permanecían en los pasillos, otros tantos ocupando la Sala de Espera de Resultados y en las estancias de espera -que la plantilla ha bautizado como salas VIP-, demoras en la asistencia "superiores a las 7 horas" y 8 habitáculos bloqueados, algunos ocupados por tres personas a la vez. Según fuentes sindicales, ayer se registraron un total de 54 ingresos distribuidos por toda la superficie del área de Urgencias ante la falta de camas. "Hay 26 personas pendientes de quedar ingresadas o ser dadas de alta que comen, duermen y se asean aquí", afirmó un portavoz del personal.

Con este panorama, los familiares de los enfermos se solidarizaron ayer con los trabajadores sumándose a la concentración. "No pueden hacer más", comentaban. Especialmente crudo lo tienen los mayores, pacientes que superan ya los 80 años y "varios están en una camilla desde el día 2".

Las críticas del personal de Montecelo también se extienden a Cardiología. "Se anulan las citas una y otra vez hasta que alguno llega con la pila del marcapasos casi agotada", aseguran.