El Partido Popular pide suprimir el impuesto de sucesiones

El presidente del Partido Popular de Galicia alertó ayer de que son muchos los gallegos que en la actualidad se desplazan a las notarías de otras comunidades -en las que sí se ha eliminado el impuesto de sucesiónes y donaciones- para legar "un piso a sus hijos" y evitar así las cargas económicas derivadas de las transmisiones patrimoniales. Ésa fue la razón esgrimida por el líder de la oposición para reclamar a la Xunta que rebaje la cuota tributaria del impuesto de donaciones de padres a hijos en un 99%, una medida que es partidario de aplicar de forma escalonada durante los próximos tres años para reducir el impacto sobre los ingresos de la Xunta.

Según Feijóo, se trata de combatir la deslocalización patrimonial y de empresas de Galicia. A través de una proposición no de ley, el Partido Popular defendió además la supresión del impuesto de sucesión entre padres e hijos y entre cónyuges, y una rebaja del 50% para otros descendientes. El líder de la oposición restó importancia al hecho de que la Xunta calcule ingresar este año 143 millones de euros derivados del cobro de estos impuestos. Insistió en que el defícit de recaudación en Galicia "se va a producir de todos modos" porque la gente sólo tiene que "coger un coche e irse a Madrid o a Ponferrada" para ahorrarse el pago de los tributos. Feijóo, que compareció acompañado del ex conselleiro y portavoz parlamentario para cuestiones económicas, José Antonio Orza, insistió en que se trata de una iniciativa "ponderada y no desorbitada" que evitará la fuga de patrimonios y empresarios sin afectar al equilibrio de ingresos de 2007.