Gandia abre al público la remodelada plaza del Prado

La plaza del Prado de Gandia muestra ya su nuevo aspecto remozado. Dos años de obras han permitido recuperar como espacio público este antiguo mercado mayorista de finales del XIX, en el barrio de El Raval, tras décadas de abandono desde que en los 60 la transformación urbana derivara en el cese de la actividad comercial, y convirtiera esta plaza (de 10.000 metros cuadrados) en un improvisado aparcamiento.

Con la llegada del PSPV y del Bloc-EV al gobierno local, se impuso la prioridad de rehabilitar este entorno urbano, en el corazón del principal eje financiero y económico de la ciudad. La primera fase del proyecto, la construcción de un aparcamiento subterráneo de dos plantas y 648 plazas, ha concluido ya. Pero falta ejecutar el plan de mejora y peatonalización de las calles adyacentes, razón por la cual el concejal de Planificación y Proyectos, Josep Miquel Moya, prefiere hablar sólo de "apertura simbólica". El coste total del proyecto asciende a 11 millones.

La remodelación de El Prado ha corrido a cargo de Ecisa-Comsa, en base al proyecto del arquitecto Juan de Otegui, pensado para combinar "el simbolismo histórico" de la plaza con una "arquitectura de vanguardia funcional". Por ello, se han preservado parte de las antiguas cubiertas del mercado, creando nuevos espacios ajardinados y de juegos de agua.

Asimismo recupera su espacio el viejo "ciprés de Rausell", en honor al apellido de la familia del que fuera alcalde a finales del XIX, a la que la leyenda atribuye la donación de la plaza a la ciudad, a cambio de conservar el ciprés. Durante las excavaciones, además, se ha descubierto un antiguo refugio antiaéreo construido en la Guerra Civil, del que se ha encargado una réplica del túnel para su exhibición pública.