CiU y ERC obligan al Gobierno a debatir el plan de infraestructuras en la Cámara catalana

Los republicanos volvieron a recordar ayer al Gobierno bipartito de Pasqual Maragall, al que califican como "Gobierno provisional socialista", que se halla en minoría en el Parlament y que no puede aprobar nada sin su consentimiento expreso. Lo demostraron aprobando una moción de CiU que obliga al Gobierno a llevar al Parlament el debate del Plan de Infraestructuras del Transporte de Cataluña.

Este plan ha enfrentado durante muchos meses al consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, con los consejeros de Esquerra Republicana (ERC)mientras éstos formaban parte del Gobierno. Y con los de Iniciativa Verds-Esquerra Unida. Los dos partidos menores de la coalición tripartita consideraban excesivamente "desarrollista" el modelo de los socialistas. El Plan de Infrastructuras del Transporte contiene elementos tan polémicos como el Cuarto Cinturón de Barcelona o sus alternativas.

Mientras existió el tripartito estos enfrentamientos se dilucidaban en los despachos, a puerta cerrada. Pero hace ya una semana que el tripartito no existe y una de las consecuencias será que el consejero Nadal deberá someter el citado plan a debate y votación en el pleno del Parlament en vez de aprobarlo por decreto, como pretendía.

Para evitar una nueva derrota, que se habría sumado a las sufridas anteayer en el debate de dos proyectos de ley, los diputados de los dos grupos que apoyan al Gobierno, el socialista y el de ICV-EUiA, se sumaron a la moción presentada por el diputado de CiU Josep Rull, apoyada por el republicano Oriol Amorós y el conservador Jordi Muntanya.

"Ahora que ERC ya no está en el Gobierno nos tememos que Iniciativa no tenga fuerza suficiente" para influir en la orientación del plan, dijo Amorós para explicar su voto. La diputada de ICV Bet Font reconoció que su grupo mantiene alegaciones al proyecto.