El Ayuntamiento estudia cambiar la normativa para prohibir los apartamentos turísticos en zonas industriales

El Ayuntamiento está estudiando medidas para intentar poner freno a un fenómeno "preocupante" que la oposición califica de "fraude inmobiliario": la construcción de edificios que, bajo la figura legal de apartamentos turísticos -es decir, destinados únicamente al alquiler-, se venden en realidad como viviendas, más baratas que las de mercado, pero ilegales. Esta nueva trampa inmobiliaria para captar desesperados buscadores de vivienda está triunfando, sobre todo, en el distrito de San Blas, donde se multiplica la construcción de apartamentos turísticos en polígonos industriales aparentemente muy poco turísticos.

Representantes del gobierno municipal y de la Comunidad -la competente para controlar que los locales hosteleros funcionen como tales- se reunieron hace días y acordaron tres vías de actuación para intentar controlar el fenómeno, según explicó ayer en el pleno municipal el concejal de San Blas, José Enrique Núñez. En primer lugar, la Comunidad va a aprobar un nuevo decreto para regular este asunto con más precisión, "porque la actual Ley de Ordenación de Turismo, de 1999, deja un vacío legal del que, efectivamente, pueden aprovecharse muchas inmobiliarias", señaló Núñez. Además, las inspecciones que ya realiza el Ayuntamiento serán, desde septiembre, conjuntas de las dos administraciones.

Y, por último y más importante, la comisión municipal encargada del Plan General de Ordenación Urbana "estudiará la conveniencia" de prohibir que en los polígonos industriales puedan instalarse edificios bajo el nombre de apartamentos turísticos.

El concejal de IU Julio Misiego, que había pedido debatir el asunto en el pleno, exigió al PP que en lugar de anunciar medidas futuras "corte de raíz" y "actúe ya" denegando las licencias de construcción. "Esto es un fraude clarísimo que, además, perjudica seriamente a las empresas y al empleo industrial de estas zonas", afirmó. Miguel Conejero, del PSOE, se sumó a la preocupación mostrada por Misiego y reclamó más iniciativa al PP.