Comisiones dice que hay 10 o 12 casas en Jaén con inmigrantes hacinados

El sindicato Comisiones Obreras reveló ayer la existencia de "al menos 12 ó 13 casos" de viviendas de la capital jiennense donde los inmigrantes se agolpan en situación de hacinamiento. Además, el sindicato sospecha que se están produciendo casos de "mercadeo" a la hora de obtener los certificados de empadronamiento que se exigen para tramitar la regularización de los extranjeros en España.

Durante la presentación del balance del proceso de normalización de inmigrantes en la provincia de Jaén -se han presentado poco más de 300 solicitudes a pesar de que las estimaciones de la propia Administración hablaban de unos 3.000 inmigrantes que podrían optar a la regularización- Comisiones destapó casos de hacinamiento entre la población inmigrante que vive en el casco antiguo de Jaén. "En pisos de 60 metros cuadrados viven al menos 12 personas, y en otros pisos de 90 metros hay hasta 20 inquilinos", denunció Juan Carlos Galiano, responsable de Migraciones de Comisiones Obreras en Jaén. A su juicio, estas situaciones se producen por los recelos de la población en general a alquilar viviendas a los inmigrantes. "Hay pocas casas que se alquilan y en las que hay se exigen fianzas de tres o cuatro meses. La vivienda para el inmigrante resulta muy cara", se lamentó Galiano.

Venta de papeles

De otro lado, CC OO no descartó que se estén produciendo casos de venta de certificados de empadronamiento -anteriores a agosto de 2004- a inmigrantes, uno de los documentos necesarios para legalizar su situación en España. "Seguramente existe mercadeo en este tema", confesó el secretario provincial de Comisiones Obreras en Jaén, José Moral, que criticó que la exigencia de este documento esté impidiendo la regularización de muchos inmigrantes. El sindicato ha pedido al Gobierno de la nación "más flexibilidad" sobre este requisito administrativo, por entender que podría suplirse con la cartilla sanitaria o incluso con una orden de expulsión del país que no llegara a ejecutarse.

CC OO valoró en términos generales la normalidad con la que se está llevando a cabo el proceso de regularización, por entender que "va a servir para que aflore el empleo irregular y se acabe con las situaciones de explotación laboral", dijo Moral. No obstante, el sindicato también se ha mostrado sorprendido y decepcionado por la actitud de muchos empresarios que han despedido a sus empleados extranjeros antes de verse obligados a su regularización. Según Juan Carlos Galiano, las quejas en este sentido "son muchas", aunque pocas son las que han podido constatarse por "el miedo" de los propios inmigrantes. Sí que denunció la existencia de al menos cuatro casos de empresarios que llegaron a pedir hasta 3.000 euros para tramitarle la documentación necesaria.