Varios centenares de personas muestran en Valencia su protesta por la degradación del Júcar y L'Albufera

Varios centenares de personas respondieron a la convocatoria de la plataforma Xúquer Viu y llevaron ayer al centro histórico de Valencia su rechazo al proyecto de trasvase Júcar-Vinalopó para que el primero "vuelva a ser un río vivo".

Los manifestantes recorrieron el tramo que comprende la base del Micalet y la plaza del Correu Vell en una peculiar procesión fúnebre. Precedidos de dolçainers i tabaleters, dos ataúdes, uno por el Júcar y otro por L'Albufera, abrían el recorrido que seguía una pancarta con el lema Pel Xúqer i l'Albufera, no al trasvassament. Los participantes en la marcha iban con velas encendidas y alguno, como Elvira, de Cullera, guardaban riguroso luto, pañuelo negro en la cabeza incluido. "El Júcar ya no lleva agua en la desembocadura, ¿cómo puede creer alguien que sobra para trasvasarla?", apuntaba, "si el agua a tres kilómetros desembocadura arriba está absolutamente salinizada".

Los representantes de la plataforma exigieron la "inmediata revisión" del Plan Hidrológico de la Cuenca del Júcar y solicitaron que se fije "con criterios científicos" un caudal ecológico proporcional a la importancia del río "tomando como referencia a otros ríos mediterráneos" así como "las aportaciones hídricas que ha de recibir L'Albufera para tener una buena salud ambiental".

Otra de las reivindicaciones es la elaboración de un plan integral que incluya la detección de la sobreexplotación de los acuíferos de Castilla-La Mancha, que nutren el río, y su recuperación, que asegure un caudal suficiente para L'Albufera y el río, así como tomar medidas contra la contaminación. Los miembros de la plataforma abogaron también por la aplicación de la directiva marco del agua de la Unión Europea que fija como objetivos de los estados miembros proteger y regenerar las masas de agua; y pidieron la resolución de las necesidades hídricas del Vinalopó.