El jurado del premio Euskadi se rebela contra las bases de Cultura

El premio Euskadi de literatura, en su modalidad de euskera, no tendrá tres finalistas, como anunció la semana pasada el Departamento de Cultura -Bernardo Atxaga, Felipe Juaristi y Jokin Muñoz- , sino cinco, al haber decidido el jurado incorporar a dos autores más, pese a no cumplir los requisitos contemplados en las bases por haberse negado a aceptar expresamente su condición de aspirantes. El jurado se ha rebelado contra la normativa y anuncia que tendrá en cuenta a ambos en sus deliberaciones y que declarará el premio desierto si uno de ellos es el ganador.

El director de Creación y Difusión Cultural del Departamento de Cultura que dirige Miren Azkarate, admitió el miércoles, en declaraciones a este periódico, que esta actuación "no es legal", pero explicó que la consejería estima que el mero hecho de anunciarla no es motivo para intervenir. Esa intervención, de producirse, debería darse, a su entender, a la vista del acta que redacte el jurado con su fallo, previsto para la semana que viene, explicó.

El jurado, en una decisión que pone en una delicada situación a Cultura como promotor del premio, ha decidido incorporar como finalistas a dos autores que no tienen la condición de tales, porque no cumplieron el requisito, contemplado en las bases de la convocatoria, de aceptarla expresamente.Estos autores, incialmente seleccionados por el jurado, son Jon Alonso y Xabier Montoya. Montoya sí cumplió las condiciones en una edición anterior y fue premiado, aunque luego no acudió a recoger el galardón de manos del lehendakari.

Esta vez, tanto Alonso como Montoya se negaron, en carta remitida al Departamento de Cultura, según señaló Arbelaitz, a aceptar la condición de candidatos al premio. Por ello fueron descartados, como ocurrió ya el año pasado con otro escritor, Koldo Izagirre, que adoptó la misma posición. Del jurado que excluyó a Izagirre formó parte precisamente Jon Alonso.

Ante la misma situación, el jurado de esta edición, integrado por Ur Apalategi, Miguel Ángel Elkoroberezibar, Ibon Egaña, Estibalitz Ezkerra y Aritz Gorrotxategi, ha decidido actuar de distinto modo. Así, en una carta remitida el domingo únicamente en euskera a los medios informativos, anunciaron su intención de contemplar como finalistas también a Montoya y Alonso. Lo harán, afirman, por considerar que la ausencia de ambos "ponía en peligro la legitimidad del premio" y "para garantizar" ésta.

"En el caso de los escritores que no han aceptado expresamente las bases del premio, si estimáramos merecedora del premio una de sus obras, dejaremos desierto el premio de literatura en euskera de este año", anticiparon. Si consideran que el premio lo merecen Atxaga, Juaristi o Muñoz, "lo nombraríamos ganador reconociéndole toda la legitimidad", añaden.

Fuentes próximas a la consejera de Cultura, Miren Azkarate, se negaron a efectuar ninguna valoración. "El departamento no tiene opinión", se limitaron a señalar. Las mismas fuentes afirmaron que el proceso de los premios se mantiene pese a este anuncio del jurado.