AVE, tren rápido o lo que sea

Estos pasados días la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, anunciaba con el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, que se iba a construir un AVE que comunicaría Zaragoza, Teruel y Valencia, en un acto claramente partidista al no ser convocado el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, como hubiese sido lo correcto. A pesar del despropósito del anuncio, la noticia era buena.

Unos días más tarde, Fomento puntualizaba la noticia. Se trataba de una infraestructura de vía doble, electrificada y que no superaría los 250 km/h, calculándose la velocidad media en torno a los 200 km/h. Esto me recuerda el proyecto inicial del PP de la puesta en marcha de un tren de gran velocidad (TGV), inspirado en el existente entre París y Lyon.

La plataforma Teruel Existe al conocer este proyecto ha mostrado su indignación por entender que se trata de un nuevo engaño del gobierno socialista, pues en la campaña electoral el PSOE prometió un AVE Madrid-Teruel-Valencia. De este proyecto o "deseo" nada más se sabe.

Consideramos bienvenida cualquier infraestructura de estas características, siempre y cuando sea fructífera para las zonas por las que discurre. Por ello reivindicamos parada en Segorbe, no solo para viajeros sino también para mercancías. No sería de recibo que el tren atravesara toda la comarca y nos limitáramos a verlo pasar.

También nos preocupa el impacto ambiental a su paso por la cuenca del Palancia, ya que no existe otro corredor. Hay que recordar que a un lado está el Parque Natural de la Sierra de Espadán y al otro el de la Sierra Calderona. Ello nos va a limitar el crecimiento urbanístico y económico y se debería tener en cuenta el no cercenar el futuro de estos pueblos.

Hace unos meses empezábamos a vislumbrar la luz de la salida del túnel en el que nos metieron los socialistas cuando gobernaban. Espero que esa luz, que ahora nos llenaba de esperanza y confianza, no sea la luz de la locomotora de un nuevo proyecto que arrase nuestro futuro.