Inversores españoles ponen alas a sus negocios

Las compañías aéreas de tarifas reducidas ya no son atractivas sólo para los pasajeros; también lo son para los inversores. En sólo un mes han aparecido las dos primeras con capital español. Una de ellas, Air Madrid, ya ha emprendido el vuelo, y la otra, Vueling, despegará el próximo primero de julio. Ambas se unen a un negocio que duplica su crecimiento cada año, pero las dos tienen mercados diferentes.

Vueling, que nace con una inversión de 30 millones de euros, tiene su sede en Barcelona y será el Prat su aeropuerto principal. Orientada a pasajeros de negocios de la pequeña y mediana empresa, unirá destinos nacionales y del centro y sur de Europa. Integra en su accionariado a los gestores, una firma de capital riesgo (Apax), un socio industrial y a Inversiones Hemisferio, una filial de Planeta.

Air Madrid, con un capital social desembolsado de seis millones de euros y formada por un grupo de hoteleros y de agencias de viaje, une el aeropuerto de Madrid con destinos latinoamericanos y tiene una eminente vocación turística, reforzada con la creación del touroperador Alada y la venta de billetes a través de 4.000 agencias de viajes.