Campaña para atajar las actitudes incívicas en el parque de la Ciutadella

El Ayuntamiento inició el pasado fin de semana una campaña de sensibilización bajo el lema Preservemos la Ciutadella, el parque es de todos, que pretende acabar con el uso incívico que algunos ciudadanos hacen del espacio, sobre todo los sábados y domingos, cuando decenas de personas invaden el césped, se concentran para tocar percusión y desde el pasado verano incluso se monta un mercadillo en una de las rondas paralelas al paseo dels Til.lers.

Durante toda la mañana del domingo, en la entrada del parque se repartió a los visitantes un folleto que se recuerda que no se puede pisar el césped, tocar instrumentos de percusión o utilizar altavoces, y que está prohibida la venta ambulante, así como llevar mascotas sin atar. Sin embargo, de poco sirvieron los trípticos y el parque vivió una jornada festiva como otra cualquiera: centenares de personas tumbadas leyendo, comiendo o jugando en el césped, jóvenes tocando bongos y djembés, perros campando a sus anchas y decenas de puestos -algunos con hornillos de butano- en los que se puede comprar desde una hamburguesa hasta un tanga o un guiñol.

La campaña va acompañada de acciones como la remoción de tierra y el vallado de algunos parterres por parte de Parques y Jardines, cuyos operarios se encargan del mantenimiento del parque. Si vallar los parterres persigue disuadir a los visitantes de que los pisen, removiendo la tierra este objetivo se consigue con toda seguridad, puesto que el suelo se convierte en un barrizal, según explicó la semana pasada uno de los responsables del parque. La misma fuente informó de que la campaña de sensibilización continuará el próximo fin de semana. Y si al tercer intento no surte efecto, está previsto que intervenga la Guardia Urbana.