Desactivada una bomba en la sede de Transportes La Guipuzcoana

Artificieros de la Ertzaintza desactivaron ayer en la entrada de la sede de La Guipuzcoana en Azkoitia (Guipúzcoa) -veterana firma de transportes por carretera- un artefacto compuesto por cuatro o cinco kilos de cloratita, uno de los explosivos que habitualmente utiliza la organización terrorista ETA.

Los autores del atentado frustrado habían escondido la bomba en el interior de una bolsa de deportes, que levantó las sospechas de un vigilante de la zona industrial donde se encuentra la empresa. Ante la duda, llamó a la Ertzaintza.

Los agentes no tardaron en llegar. Sobre las 12.30 acordonaron la zona y comprobaron que, efectivamente, la bolsa contenía un artefacto explosivo con varios kilos de cloratita. No resultó fácil neutralizarlo. Los artificieros emplearon unas dos horas y media en concluir las labores de desactivación. Para las 15.15, la zona había recuperado la normalidad.

Dos en un mes

El de ayer es el segundo ataque perpetrado contra empresas vascas de transporte por carretera durante el mes de julio. El pasado día 6, la empresa Azkar (palabra que significa rápido en euskera) sufrió un atentado en sus instalaciones de la localidad vizcaína de Bedia. Una bomba, colocada en los bajos de un camión estacionado en el aparcamiento de la compañía hizo explosión de madrugada.

La Ertzaintza descartó que se tratara de un acto de violencia callejera, porque el artefacto era de los que emplea ETA. En aquella ocasión no hubo víctimas, pero sí se registraron importantes daños materiales.