Renfe borró la 'caja negra' del tren que arrolló en abril a un policía en Alcalá

La versión que Renfe ofrece en el informe presentado al juzgado de Alcalá de Henares sobre la muerte por arrollamiento de un joven policía nacional que se apeó de un tren para ayudar a una invidente, el pasado 2 de abril, contradice sustancialmente la versión ofrecida por la familia de fallecido. Mientras la familia asegura que el policía accionó el freno de emergencia cuando el convoy reemprendía la marcha en la estación de Alcalá para que se apeara una invidente, Renfe mantiene que el tren lo detuvo un operario al observar que una persona trataba de subir en marcha.

El informe de Renfe añade también que no existen grabaciones de vídeo, ni cintas magnetofónicas con las conversaciones de los empleados del tren, ni tiene datos de la mujer invidente, y además la caja negra fue borrada y reutilizada, ya que la incidencia de la muerte del pasajero no fue considerada suficiente motivo para conservar los registros.

Ante la petición del abogado de la familia del fallecido de que Renfe facilite la denominada caja negra del tren, en la que se registran todas las incidencias, Renfe responde que 'no está disponible ya que se trata de un registrador estático, precintado y regulado por norma su manipulación, similar a un disquete que almacena datos en torno a unos 8.000 kilómetros; llegados a esta cifra vuelve a empezar anulando la información anterior, excepto si las normas de circulación obligan por la incidencia de que se trate a retirar dicho registro y reemplazarlo por otro, no siendo éste el caso a tenor de la naturaleza del accidente'.