La Diputación de Vizcaya deberá invertir 19 millones de euros para adecuar sus vertederos a una directiva de la UE

La Diputación de Vizcaya invertirá más de 19 millones de euros para adecuar sus seis vertederos a una directiva de la Unión Europea. Esta normativa obliga a que cada basurero tenga un detallado plan de gestión con una veintena de medidas, entre las que se incluye el mantenimiento durante los 30 años posteriores al cierre, que deben cumplirse para 2009. En caso contrario, se decretaría la clausura.

Las instituciones propietarias de la docena de vertederos autorizados en Euskadi deben presentar este plan, con la inversión correspondiente, antes del próximo martes, según especifica la directiva comunitaria. Vizcaya difundió ayer los proyectos de readecuación que serán analizados por la viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno vasco.

Este departamento debe decidir si el vertedero puede o no seguir funcionando. En caso positivo, fijará un periodo transitario para que se adopten las medidas previstas en el plan y conceder posteriormente la autorización para su funcionamiento. Este proceso debe culminarse para el 16 de julio de 2009 y el Gobierno vasco 'tomar las medidas necesarias' para que los vertederos que no cumplan los requisitos 'no continúen operando'.

La Diputación vizcaína difundió las inversiones necesarias en los seis vertederos que controla: Igorre, 5,2 millones de euros; Jata, 6,6; Berriz, 1,2 millones; La Orkonera, 1,9; Amoroto, 2,5 y Gordexola, 1,7. En el caso de estos dos últimos se incluye un plan de clausura, ya que el de Gordexola está inactivo y el de Amoroto se cerrará en 2003.

La diputada vizcaína de Medio Ambiente, María Esther Solabarrieta, explicó que en los últimos años ya se han realizado inversiones en estos vertederos por valor de casi 3,9 millones de euros, destinados a controlar la calidad de las aguas superficiales y subterráneas, gases, suelo y también la contratación de seguros de responsabilidad civil medioambiental.

En Vizcaya existen otros dos vertederos, el de Bilbao y Getxo gestionados por los ayuntamientos, que deben presentar también el plan de gestión. Guipúzcoa , por su parte, dispone de tres, los de San Marcos, Lapatx y Sasieta, y en Álava la directiva afecta al basurero de Gardelegi, ubicado en Vitoria.