Virtuosos del robo virtual

Clanes especializados poseen bazares en Internet que compran y venden números de tarjetas de crédito, robados en bases de datos mal protegidas. Se usan para adquirir equipos informáticos en tiendas virtuales. Según el FBI, mueven más de 1.000 millones de dólares (unos 1.087 millones de euros) al año sólo en EE UU, y detrás están mafias de la ex URSS.

Los precios de los números de tarjeta son bajos, fluctúan en el mercado negro según la información que lleven, como nombre del titular o fecha de caducidad. Según The New York Times, una tarjeta puede valer entre 40 céntimos (43 céntimos de euro) y 5 dólares (5,4 euros); se venden por paquetes: 250 a 100 dólares (109 euros) o 5.000 a 1.000 dólares (1.087 euros). Los vendedores operan en chat o páginas web que cambian de sitio. Muchos proceden de Europa del Este y Asia, especialmente Malaisia.

Claudio Hernández, experto en tecnologías de cifrado, asegura que algunos no se molestan ni en robar números y fechas de caducidad, ya que hay programas que los generan: 'Sabotean servidores. Otras mafias más grandes clonan los números'.

El teniente Juan Rodríguez Sotomayor, del grupo de delitos informáticos de la Guardia Civil, afirma conocer anuncios donde se venden discos compactos con seis millones de números, todos válidos: 'Hay gente que vive a base de esto, como uno de Algeciras que hemos cogido mil veces. Pasa igual que en Rusia, aunque el fraude en compras ha bajado porque las empresas desconfían más'. Según un estudio de Celent Communications, el fraude en Internet para Visa y Mastercard es del 0,25%, mientras que en el mundo off-line no pasa del 0,09%. Según Rosa Ovejero, de Visa, 'estos fraudes son escasos en España'. El coste para las tiendas virtuales es mayor: asumen la mayoría de las pérdidas, entre un 5% y 8% de las ventas. Sotomayor recuerda en España una web de música en línea, en 1998, de las primeras víctimas: 'Y está el timo del Nazareno: compran cuatro cosas, crean una relación de confianza, y el quinto pedido es exorbitante y lo pagan con tarjeta robada'. Los consejos para no perder la tarjeta en Internet son: tener cuenta específica, comprar en sitios familiares y asegurarse de que se usa cifrado en los datos.