El entorno de la Alcazaba de Málaga estará finalizado en 2002

El Ayuntamiento de Málaga ha dado luz verde al proyecto de obras para el entorno de la Alcazaba por 578 millones de pesetas. El Consistorio ya cuenta con una partida de 100 millones. El resto será sufragado por fondos europeos (70%) y las arcas municipales (30%). La idea ganadora del concurso está dirigida por el arquitecto Pau Soler. El Ayuntamiento licitará la obra en octubre con la previsión de que ésta concluya a finales de 2002.

La solución definitiva a la ladera que desciende desde la fortaleza árabe al Museo Municipal llega después de años de ideas, bocetos y proyectos que han quedado aparcados en el cajón, como el contratado por la anterior alcaldesa Celia Villalobos al arquitecto Federico Orellana.

El diseño decisivo de Pau Soler contempla una serie de paseos y caminos ajardinados encadenados por rampas y escaleras que, dispuestos en zig-zag, salvan los 36 metros de desnivel desde la Alcazaba hasta el Museo Municipal, una zona abierta tras el Paseo del Parque de la capital.

La obra, que actuará sobre una superficie de 7.800 metros cuadrados, contempla la ampliación del museo en 1.500 metros cuadrados, con lo que la galería contará con una zona de carga y descarga que no tenía.

El alcalde, Francisco de la Torre, reconoció ayer que 'el tema de La Coracha' se había convertido en un interrogante desde 1996, cuando Villalobos ordenó la demolición de diversas casas en ruinas en dicho lugar.

La segunda parte de la obra concierne a la otra cara de la Alcazaba y a su conexión con el Teatro Romano. Esta fase está a expensas de 'cuatro o cinco catas arqueológicas', según De la Torre.