Respuesta neutra

Las bolsas reaccionaron con tranquilidad ante la repetición de los tipos de interés en el 4,75% por parte del BCE y pasaron por alto el aumento de la inflación española en una décima, hasta el 3,9%. Los inversores en renta variable, al menos los españoles, están más pendientes de los movimientos de los grandes mercados, para no perder el paso, que de la coyuntura económica, de la que ya sabían que iba a decaer a lo largo del primer semestre.

El protagonismo siguió siendo para Telefónica, valor del que en estos momentos depende más la dirección del conjunto del mercado para los próximos días que del nivel de los tipos de interés.

La estabilidad de la cotización de Telefónica se vio rota durante algunos segundos, nada más conocerse la decisión del BCE, pero la respuesta del conjunto del mercado fue de total tranquilidad y la segunda parte de la sesión discurrió sin más contratiempos que los derivados de la importante acumulación de plusvalías.

La situación en los mercados estadounidenses, con un ligero descenso en Nueva York y un nuevo avance en Nasdaq, desorientó a los inversores europeos, pero ni siquiera sirvió para aumentar la ya elevada volatilidad de estas sesiones semifestivas, en las que el descenso de la actividad favorece a las posiciones más extremas.

El mercado secundario de deuda pública sorprendió con una nueva subida de la rentabilidad a 10 años, esta vez ocho centésimas, hasta el 5,18%, lo que favoreció al incremento de la confusión respecto de los tipos de interés.

La contratación en el Mercado Continuo fue de 271.575 millones de pesetas, 1.632,20 millones de euros.