ERC pide la paralización de las tres centrales nucleares catalanas

La central nuclear de Ascó iniciará hoy los trabajos de reparación de las fugas de agua radiactiva detectadas en la vasija del reactor del grupo II. Estas fugas han sido minimizadas por el Consejo de Seguridad Nuclear, autoridad en materia atómica, que situó el incidente 'por debajo del límite de seguridad establecido'.

Las consecuencias de la avería no se han hecho esperar y Esquerra Republicana (ERC) ha pedido la paralización de los complejos similares a los de Ascó en Cataluña, es decir, las tres centrales nucleares catalanas. IC-V, por su parte, introdujo ayer en el Parlament diversas cuestiones al respecto. Las asociaciones ecologistas siguen considerando 'muy graves' las fugas en la vasija del reactor. El portavoz de Greenpeace, Carlos Bravo, reiteró ayer la 'importancia del incidente', dado que se ha localizado en el circuito primario, correspondiente a la zona del reactor, y por tanto estructural'.

Los trabajos para evitar nuevas fugas consisten en un nuevo sellado, esta vez de grafito, de las soldaduras de los tubos que se insertan en el recipiente metálico para introducir instrumentos de medición de comportamiento de la reacción nuclear, tales como la temperatura y la presión, o para detenerla. La detección de las fugas se realizó, según explicó el responsable de comunicación de la empresa, Antonio Fernández Savín, tras un análisis visual (realizado con cámaras de vídeo) de los mencionados tubos.

Los técnicos de Westinghouse encargados de esta operación ya la han llevado a cabo en unas veinte centrales de EE UU, Bélgica y Suecia. El proceso no supondría una demora de más de un día en la puesta en marcha de la central, que estaba parada, según se establece en su programación, para la recarga de combustible, periodo que se aprovecha para inspeccionar los equipos.