Más de 400 muertos en los nuevos enfrentamientos religiosos en Nigeria

Más de 450 personas de la etnia hausa han sido asesinados por miembros de la comunidad ibo en el sureste de Nigeria, según informaron ayer diplomáticos que visitaron la región. Los hausa son mayoritariamente musulmanes, mientras entre los ibo predominan los cristianos.Las matanzas se produjeron el lunes en la ciudad de Aba, en la provincia de Abia. Según testigos presenciales, las matanzas continuaron ayer, martes, por la mañana y sólo se detuvieron cuando fueron desplegados efectivos del Ejército que habían sido enviados por el Gobierno federal nigeriano para apoyar a la policía local.

Jóvenes ibos salieron "a la caza" de hausas, buscándolos en los edificios donde éstos se habían escondido para sacarlos luego a la calle, matarlos con palos, piedras y armas blancas y quemar los cuerpos que antes habían rociado con gasolina, añadieron las fuentes.

Las peores matanzas se registraron, aparentemente, en los alrededores del mercado central de Aba, en la mezquita principal, que fue incendiada por grupos de ibos, y en las rutas de salida de la ciudad, que habían sido bloqueadas con barricadas levantadas por los protagonistas de la revuelta. Las autoridades locales, que hasta el momento no han dado a conocer el número exacto de muertos, y que algunas fuentes calculan en cerca de mil, señalaron que las matanzas son una represalia por las revueltas religiosas ocurridas la semana pasada en Kaduna y otras ciudades del norte de Nigeria.

En esa ocasión, más de 300 cristianos murieron en incidentes violentos desencadenados al oponerse a la instauración de la ley islámica o sharia. Equipos de los servicios hospitalarios custodiados por soldados han comenzado a recoger los cadáveres tirados en las calles de Aba, mientras que brigadas de limpieza municipales tratan de retirar los restos incendiados de neumáticos, ramas y escombros utilizados en las barricadas.

Las peores matanzas

Los líderes comunitarios, tanto en el sur como el norte del país, tratan de apaciguar a sus respectivas comunidades y los gobiernos provinciales que abogaban por la instauración de la sharia anunciaron que dejaban sin efecto la iniciativa "en interés de la paz y la unidad nigeriana". En Nigeria, el país más poblado de Africa, la comunidad musulmana es mayoritaria, representa al 48% de la población, mientras que los cristianos suman un 33%.