Loyola de Palacio admite que el polémico cultivo "no era una prioridad" del Ministerio de Agricultura

La ex ministra de Agricultura, Loyola de Palacio, admitió pocos reproches en su larga comparecencia ante la comisión del lino en la madrugada del viernes. Sí admitió que en el sector hay disfunciones -no supo contestar dónde va el lino que se produce- y que son necesarias mejoras. El lino, dijo "no era una prioridad" de su departamento y destacó que "nunca" hubo ningún consejero autonómico que mostrara preocupación por el cultivo o denunciara irregularidades.De Palacio no se mostró preocupada por la posibilidad de que la polémica llegue al Parlamento Europeo. Aunque el PSOE tiene difícil trasladar la polémica a Estrasburgo -no es políticamente rentable para sus intereses en España-, no es descartable que algún eurodiputado no español del Grupo Socialista Europeo plantee el asunto.

De Palacio señaló el pasado jueves que el eurodiputado socialista Enrique Barón ya lo había hecho en mayo pasado, algo que éste ha negado. "No he planteado pregunta alguna y lo que me preocupa es la osadía y la ignorancia de una europarlamentaria sobre cómo funcionan las cosas", señaló Barón a este diario. Barón agregó que no tiene necesidad de plantear ninguna cuestión ya que la Oficina de Lucha Contra el Fraude se ha interesado de oficio por el asunto al tratarse de casos de "presunto enriquecimiento injusto y prevaricación" usando fondos europeos.

En la comisión de investigación, Carlos Caballero (PNV) sorprendió cuando, al interrogar a la ex ministra, aludió a su pasado y a sus supuestas simpatías franquistas. Caballero se equivocó a propósito y llamó a la ex ministra "Loyola Jaúregui [palacio, en euskera]", afirmando despúes que había cambiado de apellido por su rechazo a lo vasco.

La ex ministra desmintió que hubiera traducido su apellido y también habló del pasado. Cuando el PSOE reprochó al PP confundir lo público con lo privado, De Palacio aludió a las compras de joyas "con fondos reservados" por altos cargos de Gobiernos socialistas.