Séptimo día de caída

El índice general de la Bolsa de Madrid vivió una nueva jornada de descensos, el séptimo consecutivo. Una vez más, la Bolsa española fue la que peor comportamiento tuvo respecto al resto de las plazas europeas, al finalizar todas con signo positivo. La debilidad de los mercados se ha vuelto a poner de manifiesto y, a pesar de que la mayoría de los valores se encuentran en unos niveles atractivos para tomar posiciones, nadie se atreve a dar el primer paso. Los inversores esperan nuevos datos económicos que aclaren la incertidumbre existente desde hace ya semanas respecto a la evolución de los tipos de interés. De todas formas, cualquier subida que se produzca de tipos, tanto en EEUU como en la zona euro, debería estar ya más que descontada según opinan buena parte de los analistas. La atención la volvió a concentrar Alan Greenspan que reiteró el temor a un repunte de la inflación y la idea clara de subir el precio del dinero si se produce un crecimiento económico.Estas declaraciones no resultan nada nuevo para las mercados, aunque habrá que esperar a la valoración final de Wall Street sobre ellas para comprobar si tienen alguna repercusión en la jornada de los mercados de hoy.

La actividad negociadora mantiene su línea moderada con 131.428 millones de pesetas efectivas, 789 millones de euros. En el mercado de divisas, la tranquilidad fue la nota destacada con un euro que marcó su precio oficial a 1,0603 dólares, mientras que la rentabilidad de los bonos a 10 años cerró a 4,92%, prácticamente en los mismos niveles de los últimos días.