El Sinn Fein pide que Blair intervenga en la disputa de las marchas orangistas

Las conversaciones entre orangistas de Portadown y la asociación de vecinos nacionalistas sobre el recorrido de las marchas unionistas se suspendieron ayer en respeto a la última víctima del conflicto, Elizabeth O"Neill, cuyos funerales se celebran hoy. Madre de dos hijos, O"Neill murió en la madrugada del sábado en un atentado atribuido a los extremistas protestantes. El Sinn Fein pidió ayer la intervención del primer ministro, Tony Blair."Esta gentuza está preparada a atacar porque piensan que una persona puede ser católica", resaltó el jefe de la policía norirlandesa, Ronnie Flanagan. O"Neill creció en el ámbito protestante pero su matrimonio con un católico le colocó en el punto de mira de la creciente campaña de violencia lealista. El domicilio familiar se ubica en un barrio protestante de Portadown a corta distancia de Garvaghy Road, de vecinos católicos que viven prácticamente sitiados. Miembros de la logia local orangista montan guardia en la zona desde que su tradicional marcha de julio fue prohibida el año pasado. "Ya es hora de que Blair haga respetar los derechos de los nacionalistas de Garvaghy. Esta asediada comunidad ha sufrido mucho en las manos de los orangistas fundamentalistas", señaló ayer Gerry Adams, presidente del Sinn Fein.