El valenciano no es requisito para ser funcionario docente de carrera

La convocatoria de oposiciones para maestros y profesores, publicada en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana del 6 de mayo, no contempla el conocimiento del valenciano como requisito para ser funcionario de carrera en la Comunidad Valenciana. La Consejería de Educación prescinde del certificado de capacitación lingüística en las oposiciones, lo que afecta en total a 1.255 plazas de trabajo. CC OO, que denunció la situación, ha anunciado una campaña de presión entre el profesorado, incluida la vía jurídica.

La convocatoria de oposiciones publicada en el DOGV, el jueves pasado, responde a una convocatoria previa a las ofertas de empleo público que se llevarán a cabo en los próximos tres meses,cuando se aplique el Acuerdo Valenciano de Empleo Público (AVEF), y contempla transformar en empleo fijo 1.255 plazas docentes (975 para el cuerpo de maestros de Primaria y 280 para el de profesores de Secundaria). Sin embargo, para la federación de enseñanza de CC OO, sindicato que firmó el AVEF, el hecho de que la Administración no haya recogido la propuesta de exigir el requisito de estar capacitado para impartir clases en valenciano para ser funcionario de carrera representa una involución respecto al proceso de normalización lingüística iniciado hace 13 años con la Llei d"Ús i Ensenyament del Valencià. En la práctica, la ausencia del dominio del valenciano pone en riesgo la continuidad del proceso de normalización lingüística en el que están inmersos cerca de 600 centros educativos de toda la Comunidad Valenciana, que bien ofrecen programas de inmersión lingüística o bien tienen implantadas líneas completas de enseñanza en valenciano. En consecuencia, el sindicato anunció ayer que iniciará una defensa en todos los foros de normalización lingüística del País Valenciano "para que el sistema educativo público ofrezca una enseñanza en valenciano de calidad". De entrada, la campaña se llevará a cabo entre el propio profesorado a fin de presionar a la Administración para que rectifique y contemple la capacitación en valenciano en las próximas convocatorias. Según fuentes de CC OO, el sindicato había tratado de negociar una salida pactada al tema del requisito lingüístico después de que la Dirección General de Personal de la Consejería de Educación se negara en redondo a implantar el modelo catalán. Una fórmula, basada en el método selectivo de todos aquellos que opten a funcionarios docentes de carrera, por la que la Administración exige el dominio del idioma como condición sine quanon para dar por aprobada la oposición. Tras el rechazo tajante, CC OO propuso entonces que se hiciera un proceso en dos partes. Esto es, que una vez aprobado el primer examen del concurso-oposición, la Consejería de Educación exigiera el dominio del valenciano en la siguiente fase de prácticas, lo que concedía al aspirante uno o dos años para preparar su capacitación. Esta última fórmula también fue rechazada por la consejería en las negociaciones de febrero y marzo. Con todo, la ausencia del requisito lingüístico no es algo nuevo. Al contrario, sigue la línea política implantada por los populares el año pasado, cuando Educación decidió que el valenciano no puntuara en el concurso de traslados de maestros que optaron a una plaza fija en 1998. La medida provocó una airada polémica en las Cortes, y fue severamente criticada por todos los grupos de oposición de izquierda.