El Museo de San Telmo presenta los mejores grabados españoles de 1998 La muestra, abierta hasta abril, recoge obras de Óscar Manesi, Chillida y Juan Luis Baroja

San Sebastián se convierte por primera vez en la capital del grabado. El Museo de San Telmo alberga desde el pasado viernes la muestra de la sexta edición del Premio Nacional del Grabado, que reúne las obras más selectas -un total de 52- de artistas que destacaron en esta técnica a lo largo de 1998. Paisaje de guerra en África, del argentino Óscar Manesi, ganador del premio nacional, preside una de las salas del antiguo convento dominico.

La muestra, que permanecerá abierta hasta el 4 de abril, recoge también piezas de Eduardo Chillida, Juan Luis Baroja Collet y Txuma Sánchez, entre otros. La exposición se convierte en escaparate de las últimas tendencias en el grabado. En Paisaje de guerra en África, Óscar Manesi mezcla el fotograbado, el aguafuerte y la tinta bruñida. Su fin último: plasmar una imagen desoladora de parajes devastados tras una batalla. Manesi, convencido de que África es el continente más "utilizado" advierte sobre el "padecimiento" de sus gentes. Utiliza blancos, negros y grises para transmitir el horror que yace en los nichos de los cementerios. El artista argentino, quien lamenta que el grabado haya sido relegado tradicionalmente a un segundo plano "por no ser obra única", no entiende el arte por el arte, el trabajo sin contenido ni mensaje. Precisamente reivindica por eso su valor: "Este arte", afirma, "permite a través de varias copias que el mensaje del artista llegue a un mayor número de personas". Manesi, quien lleva 30 años trabajando el grabado, elogia a Chillida. En esta muestra, su trabajo comparte espacio con cinco obras del artista vasco, que recibió el premio por su actividad como grabador en 1997. De las paredes de San Telmo cuelgan Topaketa, una pieza realizada en aguafuerte sobre cobre; Lagunkide, fruto del empleo del aguafuerte y el aguatinta sobre cobre; Opa, xilografía sobre boj; Esku y Guggenheim III. Pero las obras del artista donostiarra no son las unicas vascas que figuran en la muestra. La dama negra, de Juan Luis Baroja Collet y Caleidoscopio, de Txuma Sánchez, también fueron seleccionadas. Exposición itinerante Figura también un grabado del malagueño Manuel Franquelo, reconocido por las innovaciones aportadas al arte gráfico, y las obras con que Juan Giralt Ortiz y Julio León Aguilera lograron sendas menciones honoríficas. Esta exposición itinerante, que se inauguró en Madrid a finales de noviembre, recaló en Córdoba y, tras pasar por San Sebastián, continuará su viaje por Ibiza, Toledo y Andorra. Se cumple así con el objetivo de sacar el grabado del taller y difundirlo entre la población. El director de Calcografía Nacional, Juan Carrete, entidad convocante del certamen, insiste en que "la obra que aquí se expone es actualmente uno de los eventos de más relevancia dentro del panorama artístico español contemporáneo". Al concurso se presentaron 300 obras, realizadas por 215 grabadores. En la muestra se exhiben las 52 mejores.