Decenas de miles de vascos piden en Bilbao el acercamiento de presos

Decenas de miles de vascos se manifestaron ayer en las calles de Bilbao bajo el lema "Por los derechos de los presos vascos", en un acto masivo convocado conjuntamente, por vez primera desde 1976, por el PNV, Herri Batasuna, EA e Izquierda Unida, con apoyo de los sindicatos nacionalistas. A la cabeza de la marcha, sosteniendo la pancarta a favor del acercamiento de los presos, figuraron el dirigente nacionalista Xabier Arzalluz, Arnaldo Otegi y Jon Idígoras (HB), Carlos Garaikoetxea (EA) y Javier Madrazo (IU). El Ejecutivo vasco decidió no apoyar formalmente la marcha, pero contó con la presencia de algunos de sus miembros, recién nombrados. La concentración ha sido para sus convocantes un banco de pruebas de lo que la unidad nacionalista sellada en Lizarra puede dar de sí en términos de movilización callejera. Mientras, el portavoz del Gobierno, Josep Piqué, salía al paso para recordar que la política penitenciaria es competencia exclusiva del Estado y que las manifestaciones de este tipo son legítimas, pero lo serían mucho más si sus convocantes condenaran también la violencia. Ayer, coincidiendo con la manifestación, se produjeron nuevos ataques del entorno de ETA en el País Vasco y Navarra, esta vez contra el concejal socialista de Ordizia José Manuel Ros, contra un concesionario de coches franceses en Hernani y contra el director general de Educación del Gobierno de Navarra, cuyo automóvil resultó incendiado.