El Gobierno crea 440 nuevas plazas en centros para mayores "de clase media"

El Consejo de Gobierno aprobó ayer un desembolso de 1.413 millones de pesetas para las 300 plazas de residencia para ancianos, cofinanciadas, anunciadas para este año. Éstas se unen a otras 140 que puso en marcha la Consejería de Servicios Sociales en julio pasado. La Comunidad abona el 40% del coste de esas plazas y los mayores el 60% restante. Este nuevo tipo de plaza tiene como objetivo "ayudar a las personas mayores de las clases medias", según el consejero de Presidencia, Jesús Pedroche.

"Éste es un procedimiento original e inteligente para dar atención a los mayores que se encontraban en terreno de nadie, puesto que superaban el baremo para acceder a residencias públicas pero encontraban muy caras las privadas", argumentó el brazo derecho de Ruiz-Gallardón. El compromiso del Plan Gerontológico para 1998 cifraba las plazas cofinanciadas en 300, pero la Consejería de Sanidad y Servcios Sociales ha elevado finalmente esa oferta a 440 tras poner el marcha para ese fin una residencia en Coslada, informa Azucena Criado. Todas las plazas son para ancianos asistidos y se han ofrecido por carta a aquellos que se encuentran en lista de espera.El precio asciende a 196.000 pesetas mensuales, de las que el usuario aporta 117.600, mientras que la Administración asume las 78.400 restantes. El Gobierno regional ha optado por gestionar esta oferta a través de "la iniciativa social", en palabras de Pedroche; a través de residencias privadas, para decirlo con menos rodeos. Todas ellas concertadas.

Una excepción es el centro de Coslada, donde se ensaya un modelo mixto de gestión: se trata de una residencia levantada sobre una parcela cedida por el Ayuntamiento y construida por una empresa de Caja Madrid. Ésta tiene la gestión durante 40 años. Pasado ese tiempo el centro pasará a la Comunidad. Ésta controla, según los baremos, la adjudicación de todas las plazas. El centro se adjudicó con Elena Vázquez al frente de la Consejería de Servicos Sociales, en el último Gobierno socialista.

El portavoz del Ejecutivo madrileño defendió las plazas cofinanciadas como una solución "para atender a todos los segmentos de la población; y los segmentos medios", aclaró, "tienen tantos derechos como cualquier otro". A su juicio, el precio de una plaza privada, por encima de las 200.000 pesetas, no puede ser asumido por la mayoría de las familias.

Minusválidos

No fue éste el único compromiso de inversión sanitaria que ayer salió de la reunión semanal del Ejecutivo. Otra partida, ésta de 495,5 millones de pesetas, servirá para cubrir conciertos, a partir del mes de septiembre, a unos 170 usuarios con minusvalías psíquicas. La mitad de ellos irá a un centro en Getafe, y el otro grupo se acomodará en unas instalaciones en la zona centro de Madrid. "Se trata de una alternativa a lo de antes, a los psiquiátricos", resumió Pedroche. Una tercera dotación, de 710 millones, se consagra a la atención sociosanitaria de personas mayores en residencias, un programa concebido para aquellos ancianos que precisan de atención médica intensiva y especializada.