"En pie y en actitud respetuosa

Si el real decreto que se propone aprobar hoy el Gobierno hubiera estado en vigor en 1992, el acto de inauguración de los Juegos Olímpicos de Barcelona no hubiera sido igual. Las autoridades recurrieron entonces a un truco para evitar el abucheo que los independentistas catalanes tenían preparado para el Rey: hacer coincidir la entrada de don Juan Carlos en el estadio con la interpretación de Els Segadors. La nueva normativa dispone, sin embargo, que en los actos oficiales en las comunidades autónomas en que esté previsto interpretar himnos oficiales el Himno Nacional se tocará en primer lugar.El texto del decreto, que ayer fue adelantado por El Mundo, consagra la Marcha Granadera o Marcha Real como Himno Nacional de España y establece dos versiones oficiales: la completa y la breve, sin compases repetidos. La primera se interpretará en los actos de homenaje a la bandera española y en los actos oficiales a los que asistan el Jefe del Estado o su consorte. La versión abreviada, en los actos oficiales a los que asistan el presidente del Gobierno, el Príncipe de Asturias o las Infantas, así como en los eventos deportivos o de otro tipo en que haya representación española.

"Durante la interpretación del Himno Nacional de España, todos los presentes deberán permanecer en pie y en actitud respetuosa y el personal uniformado de las Fuerzas Armadas y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad efectuará el saludo reglamentario", precisa el texto.

El decreto se limita, en este aspecto, a regular lo que constituye una práctica establecida por la costumbre y a llenar un vacío, ya que la anterior normativa data de 1942 y su vigencia resulta más que discutible.

La decisión se produce una semana después de que el Gobierno comprase a los herederos del maestro Pérez Casas, por 130 millones de pesetas, los derechos de autor sobre la Marcha Granadera o Marcha Real.