Algry reconoce que carecía de permiso para almacenar un producto corrosivo

La fábrica Algry, donde el pasado 13 de enero se registró un escape de gas que obligó a desalojar la colonia de Valdebebas (Fuencarral), ha reconocido que el almacenamiento de trimetilamina -una de las sustancias que formó la nube química- no estaba registrado en la Dirección General de Industria. Este hecho ha motivado la apertura de un expediente sancionador contra la empresa (véase EL PAÍS del 24 de enero).El portavoz de la empresa, Manuel Aguirre, afirmó que los depósitos, pese a no estar registrados, habían sido sometidos a revisiones periódicas, la última en agosto de 1992. "Que la trimetilamina no esté registrada no quiere decir que la empresa esté en una situación ilegal, sino que, "simplemente, faltaba un trámite administrativo para el registro final. Es como si caduca el carnet de identidad y no se renueva a tiempo", dijo Aguirre a Europa Press.

Los técnicos de la Dirección General de Industria han indicado que la no inscripción del almacenamiento quebranta las medidas de seguridad impuestas por el Reglamento de Productos Químicos.

La trimetilamina, un gas más denso que el aire, es corrosiva para los ojos, la piel y el sistema respiratorio. El día del escape se mezcló con ácido clorhídrico y formó una nube de clorhidrato de trimetilamina. Unas 60 personas fueron atendidas por los servicios sanitarios.

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