La mitad de los chavales de la Comunidad prefiere videojuegos de lucha y combate

Al 54% de los niños madrileños le gustan los videjuegos con luchas y combates. Un 40% reconoce que esta afición le quita tiempo para estudiar. El 35% juega menos de tres horas a la semana; el 31%, de dos a tres horas, y el 9%, de cuatro a seis. Esta cifra, sin embargo, se incrementa al preguntar a sus padres.Son datos reflejados en la encuesta realizada por la Confederación Estatal de Consumidores y Usuarios (CECU) en la Comunidad de Madrid para evaluar los posibles efectos que estos juegos están produciendo en niños y jóvenes.Padres, tambiénEl sondeo fue realizado entre niños de 6 a 15 años, padres y profesores de colegios de Leganés, Fuenlabrada, Torrejón de Ardoz y Velilla de San Antonio. Forma parte de un estudio más amplio, que abarcará a otras comunidades autónomas, como Cataluña, Andalucía o Valencia, que ha patrocinado la Comisión de las Comunidades Europeas y que servirá de marco de referencia para que la Comisión Europea estudie las normas aplicables a este sistema de juegos.

También se ha puesto de manifiesto que son los niños los que eligen los videojuegos y que los padres ignoran el tipo de juegos que compran a sus hijos. El 53% compra los juegos que le piden los pequeños y un 34% ni siquiera sabe cómo se utilizan las videoconsolas.

"Los videojuegos no son en sí un producto ni bueno ni nialo", asegura María Rodríguez, presidenta de CECU. "Todo depende del uso que se le dé y del juego en cuestión, porque los hay que fomentan la violencia, la discriminación, el racismo y la diferencia entre sexos".

Los videojuegos se han convertido en una de las industrias de juguetes que más ingresos proporcionan, con unas cifras de negocio cercanas a los 45.000 millones de pesetas de beneficios. El 85% de los niños encuestados tiene videojuegos en casa, aunque sólo el 9% reconoce jugar con ellos.Discusiones en casaLa mayoría de los niños tiene una consola para televisión, y les siguen en porcentajes la consola portátil y los juegos para ordenador. La afición de los chavales a la pantalla es la mayor causa de discusión con sus padres.

Según se refleja en el estudio, un 36% de los progenitores reconoce que ha discutido con sus hijos a causa de los videjuegos, aunque la mitad desconoce cuáles son los juegos favoritos de sus hijos.

En cuanto a los problemas de aislamiento que pueden ocasionar, más de tres de cada diez niños aseguran que prefieren jugar solos con la consola.

Los educadores opinan, por su parte, que los videojuegos hacen más individualista al niño, que potencian la agresividad y que resta tiempo a otras actividades pudiendo crear adicción.

Como factores positivos destacan que puede acercar a los niños a la informática y que estimula la coordinación óculomanual y los reflejos. Todos los maestros encuestados considera que influyen en el comportamiento de los niños, el 41% negativamente y el 53% con influencias negativas y positivas.