Detenido el integrista egipcio que secuestró un avión holandés
Un integrista egipcio que había secuestrado ayer un avión holandés que realizaba el trayecto entre Túnez y Amsterdam y lo había desviado hacia Düsseldorf fue capturado en la madrugada de hoy, hacia las 2 de la mañana (hora peninsular española), por la policía alemana, que liberó a los dos últimos rehenes que el pirata tenía todavía en su poder. El anuncio fue hecho por el portavoz de la policía en la ciudad, Friedhelm Werner, media hora después de la operación.Antes, el aparato, de la compañía KLM, había quedado inmovilizado durante varias horas en una pista del aeropuerto alemán, cercado por fuerzas de la policía. El secuestrador, que pedía. la liberación de un dirigente islámico en Nueva York, mantenía todavía como rehenes a dos personas, el piloto y un sobrecargo. Éstos, según la policía, se encuentran en perfectas condiciones.
El secuestro se produjo a finales de la mañana, poco tiempo después de despegar el avión, un Boeing 737, de la capital tunecina, con 135 pasajeros y siete miembros de la tripulación a bordo. El pirata aéreo irrumpió en la cabina y amenazó con volar el aparato si el avión no emprendía inmediatamente rumbo a Nueva York. El secuestrador aceptó finalmente aterrizar primero en Düsseldorf.
Allí, precisó sus exigencias. Pidió la liberación del líder integrista egipcio Cheikh Abdel Rahman, el anciano clérigo casi ciego acusado de ser el inspirador del atentado contra el World Trade Center de Nueva York, el pasado 26 de febrero, en el que murieron seis personas. Abdel Rahman está encarcelado desde el pasado 2 de julio. También exigió el secuestrador que el avión se dirigiera a Nueva York para recoger al líder integrista.El pirata liberó posteriormente a todos los pasajeros y a cuatro de los siete miembros de la tripulación. Tras largas negociaciones, dejó salir anoche al copiloto, una mujer, al tiempo que amenazaba con volar el avión si no se accedía a su exigencia antes de esta mañana.Este secuestro se produjo precisamente el día en que se ha abierto en El Cairo, ante el Tribunal Militar Supremo, el juicio contra 53 integristas musulmanes -entre ellos tres militaresacusados de querer derribar al régimen. Siete de ellos se encuentran en rebeldía. Varios de los acusados pueden ser condenados a la pena capital.
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