Huelva sufrió ayer una acumulación excesiva de dióxido de azufre

La Junta de Andalucía ha abierto un expediente para investigar la procedencia de las emisiones de dióxido de azufre (SO2) que produjo ayer una acumulación de este gas tóxico por encima de los valores normales, en la capital onubense. Decenas de ciudadanos de Huelva sufrieron irritaciones en ojos y gargantas además de molestias respiratorias, aunque según el Gobierno Civil no hubo riesgo grave para la salud.

El incidente se debió a una inversión térmica en la atmósfera. La falta de viento dificultó la dispersión de estas emisiones gaseosas que se utilizan para la elaboración de ácido sulfúrico. El cielo de Huelva estuvo por ello excesivamente contaminado.Los sensores instalados en distintos puntos de la ciudad para controlar los niveles de contaminación detectaron sobre las 10.30 horas esta, acumulación tóxica. El humo procedía de las chimeneas del cercano polo químico y la Junta de Andalucía instó a las empresas a reducir la producción en las fábricas y sus emisiones de gases que el viento empujaba hacia el casco urbano. Según la Junta, a partir de las 12.45 comenzó a desaparecer la nube tóxica hasta que se registraron los valores permitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El delegado del Gobierno en Huelva, Carlos Sánchez Nieva, dijo ayer que la Junta va a obligar a las empresas del polo a que ultimen sus planes de corrección de vertidos a la atmósfera "para evitar que se repitan estos incidentes".

La normativa ambiental comunitaria sólo sanciona los valores medios de contaminación que se dan a lo largo de un día y no dice nada sobre un hecho puntual como el que ha ocurrido en Huelva. "Aquí hay un problema claro. La normativa debe cambiar porque ante un incidente de acumulación tóxica lo importante son los valores puntuales que se dan en una o dos horas", dijo Sánchez Nieva.