La entrada de cocaína en España sigue en "niveles significativos", según EE UU

Un informe de junio pasado del Comité de Inteligencia sobre Consumo de Drogas de EE UU (NNICC) refleja que "el uso de Portugal y España como puntos de entrada para la cocaína [en Europa] continúa a significativos niveles en virtud de los vínculos con Latinoamérica". Esto viene respaldado por el último informe del departamento antidroga de EE UU (DEA), que revela que el kilo de cocaína cuesta la mitad en España que hace tres años.

Un informe del Drug Enforcement Administration (DEA) publicado este año en el apartado referido a España arroja una serie de inquietantes conclusiones sobre el grado de permeabilidad que sigue ofreciendo el territorionacional para la entrada de la cocaína, a pesar de los éxitos policiales en este terreno y las importantes capturas de afijos.Este documento apunta que Ios precios al por mayor por kilo de cocaína continúan descendiendo y actualmente se sitúan entre 2.700.000 pesetas y 3.500.000 pesetas. Tres años antes, el kilo de coca se vendía entre cinco millones de pesetas y 5.700.000 pesetas".

Este documento afirma que hay "aproximadamente 22 puertos de distinta entidad a través de los cuales la cocaína puede ser introducida en España o Portugal. La principal ruta de tráfico de cocaína parece ser el envío directo por vía marítima desde Colombia. La DEA afirma que "representantes de los carteles de Medellín y Cafi dirigen todos los altos niveles de las redes de distribución españolas". Además, "delincuentes portugueses y españoles colaboran al máximo en los esfuerzos de dichos carteles para la introducción de la droga".

Por otro lado, según el departamento antidroga estadounidense, el método principal empleado para el transporte de droga son los contenedores. Igualmente se señala que "tanto Argentina como Panamá se han destacado como áreas de reposo de embarques de miles de kilos de cocaína en polvo con destino a distribuidores europeos".

Mayor preocupación muestra la DEA por la situación de Portugal: "El tráfico de cocaína se ha incrementado a un nivel tan alarmante que las autoridades portuguesas han pedido oficiosamente la presencia permanente de una representación de la DEA en este país. Portugal es principalmente un punto de desembarco de cocaína con destino a Francia, Alemania, Holanda, España y Reino Unido.

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