El Instituto del Teatro del Mediterráneo ofrecerá en España, Francia, Italia y Grecia montajes relacionados con la violencia

El Instituto Internacional de Teatro del Mediterráneo ha organizado un ciclo de espectáculos, titulado Mediterráneo, violencia y paz, en el que participarán España, Francia, Italia y Grecia con montajes que reflejen como ha tratado el teatro el tema de la guerra a lo largo de los siglos. El proyecto, que se celebrará en estos cuatro países desde agosto hasta noviembre de este año contará con la colaboración de áirectores como Maurizio Scaparro, Jacques Nichet, Teodoros Terzopoulos y Marlo Gas, según anunció ayer en Sevilla el presidente del instituto, José Monleón.La idea, que surgió en el seno de la organización Internacional el pasado 2 de agosto cuando Irak invadió Kuwait, se presentó ayer momentos antes de la clausura de los primeros Encuentros sobre teatro, memoria y utopía que, desde el pasado sábado, se han celebrado en la isla de La Cartuja, sede de la futura Exposición Universal de 1992.

El ciclo de teatro Incluye además un espectáculo en el que cuatro actrices, cada una representando a un país, harán un monólogo sobre la violencia.

"La española Nuria Espert y la griega Irene Papas han confirmado ya su participación, y aún no podemos decir quiénes serán las otras dos", manifestó Monleón.

Los Persas, de Esquilo, dirigida por Terzopoulos e interpretada por la compañía Atis Teatro, representará a Grecia.

El montaje italiano es la adaptación de Marguerite Yourcernar de la obra Adriano, que estará dirigida por Scaparro e interpretada por Giorgio Albertazi. Una versión de Francisco Nieva de La Paz, de Aristófanes, bajo la dirección de Mario Gas, representará a España, y la producción francesa, que aún no ha sido concretada, contará con la dirección de Jacques Nichet.

"Ademas de estas cuatro producciones, el escritor Heiner Müller dirigirá e interpretará su propia obra Prometeo. Se trata de mitos clásicos de la violencia que se nos presentan desde puntos de vista de creadores vivos, no partiendo de una evocación arqueológica. La celebración de este ciclo no es una respuesta coyuntural al estallido de la guerra, sino que es una reflexión y un proyecto anterior", señaló Monleón.