Un recurso arbitral sin precedentes

La presentación de un recurso por parte de la comisión gestora del Colegio Nacional de Árbitros contra la sanción impuesta a un jugador es una medida inusual en el fútbol español. Tanto Pedro Escartín corno José Plaza, ex presidentes del colectivo arbitral, no recuerdan un caso similar."En diferentes ocasiones", explicó ayer Plaza a la agencia Efe, "los árbitros hemos reclamado alguna sanción por declaraciones de técnicos o presidentes, pero nunca por agresión de un jugador". El ex presidente de colegio arbitral no quiso pronunciarse sobre la dec".sión del Comité de Apelación que preside José Miguel Zubizarreta: "Además del cargo de presidente del Comité de Apelación también lo es de la junta electoral de los árbitros y todo el mundo sabe que tengo un contencioso con él".

Respecto de Zubizarreta, el presidente del Comité de Apelación aseguró que la decisión de ampliar la sanción a Stoichkov se tomó por unanimidad: "Estuvimos cinco horas discutiendo porque tanto el Barcelona como los árbitros presentaron recursos amplios. Vimos el video varias veces y la resolución fue larga. Yo no tengo ninguna duda de que fue una agresión y también lo es para los dirigentes del Barcelona, pero algo tienen que decir cuando no se poseen argumentos".

Zubizarreta desmintió que su amistad con Juan Antonio Samper, asesor jurídico del Real Madrid, hubiera podido influir en el fallo: "MI única relación con los hermanos Samper, Jesús y Juan Antonio, es de amistad. No nos une una relación laboral o mercantil. Es una infamia el difundir la noticia de que tenemos un despacho de abogados. Nos conocemos desde niños y esa amistad la pienso seguir teniendo. Además, los otros tres miembros del comité tampoco tienen relación con Samper".

Diversas personalidades catalanas relacionadas con el mundo del fútbol mostraron ayer su disconformidad con el fallo. Josep Lluís Vilaseca, secretario general de Deportes de la Generalitat, opinó:"La sanción es muy dura porque no es lo mismo un pisotón que una patada". Antoni Puyol, presidente de la Federación Catalana, la calificó de "auténtica barbaridad" y añadió: "Algo huele a podrido en los comités y parece claro que el colectivo de árbitros ha hecho el trabajo sucio a alguien". .