Para el tráfico

He leído con sumo interés el artículo de su periódico sobre el estudio del señor Bernhard Winkler respecto al tráfico en Madrid, publicado el domingo 4 de noviembre, y creo que es digno de atención por parte de todos los madrileños, pues aborda uno de los problemas, a mi juicio, más importantes de nuestra ciudad.Parece claro a los ojos de todos que la solución de los problemas de tráfico en Madrid no pasa por el ensanche de carreteras, la reordenación de las calles y la creación de aparcamientos para residentes. Todas estas medidas están muy bien, pero la realidad es que el número de vehículos privados aumenta y, literalmente, no caben en la ciudad. También habría de resultar obvio que mientras los madrileños tarden algo menos o lo mismo en su coche que en el transporte público preferirán soportar atascos antes que esperar un autobús durante interminables minutos en una fría calle o intentar entrar en un metro atestado.

Hay que pensar seriamente en las propuestas de Winkler. Aumentar sensiblemente la frecuencla de los transportes públicos, así como su número, y no sólo en las horas punta, de manera que el usuario aprecie que le resultan más útiles y no más incómodos no sería mala idea. Y por supuesto, comenzar a limitar el tráfico en el centro de la ciudad, lo que permitiría una mayor agilidad de autobuses y taxis y una sensible disminución de la contaminación, es una medida a adoptar con urgencia- Jesús Sánchez-Corriendo