El Papa de la Obra

Juan Pablo II ha sido el primer Papa que ha dado estructura jurídica al Opus Dei, que hasta 1982 aparecía en los anuarios pontificios dentro del apartado de institutos seculares y bajo el nombre de Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y del Opus Dei. Las cosas han cambiado desde la llegada de Carol Wojtyla al trono de Pedro y hay quien ya no duda en calificarle como el Papa del Opus Dei, a pesar de que esta definición no agrada al Pontífice.La actual y única prelatura personal, de la que es titular Álvaro del Portillo, cuenta cada vez más con mayor influencia en la curia vaticana. Resulta difícil. distinguir entre quién es miembros del Opus y aquellos que se declaran simplemente simpatizantes. Su poder, a juicio de algunos vaticanólogos, es grande.

Sociedad secreta

Algunos atribuyen a la mediación del Papa el cese de la polémica sostenida en Italia sobre si el Opus era o no una sociedad secreta, cuando era ministro de Interior el democristiano Oscar Luigi Scalfaro.

Las relaciones tensas mantenidas entre los papas anteriores -come Pablo, VI- y Ia ahora prelatura personal, han tocado a su fin con Juan Pablo II. No falta quien afirma que al Opus le gustaría más que el Pontífice se dedicara con mayor fuerza a los asuntos internos de la Iglesia -la disciplina, por ejemplo- y un poco menos a temas externos, como los de justicia social. Sin embargo, existe una cierta sintonía. Un ejemplo de ello es el respaldo que obtienen del Vaticano las posiciones de los movimientos más conservadores frente a otros como Acción Católica. Esto se ha puesto nuevamente de relieve en el sínodo que actualmente se celebra en Roma.

Al igual que los jesuitas tienen la universidad Gregoriana y los dominicos el Angelicum de Roma, también el Opus hace notar su presencia con la apertura de un centro de teología, donde se forman algunos de sus sacerdotes, muy cerca de la plaza de San Pedro.