La policía secreta chilena encargó en España a fascistas italianos atentar contra Leighton, dice un testigo

Oficiales de la DINA (policía secreta chilena) encargaron a neofascistas italianos residentes en España el atentado contra el vicepresidente de la Democracia Cristiana de Chile en el exilio, Bernardo Leighton, llevado a cabo el 10 de octubre de 1975 en Italia, según ha declarado a la justicia italiana el terrorista de extrema derecha Aldo Tisei. Leighton y su esposa resultaron gravemente heridos.

Tisei ha declarado en Roma que "precisamente los servicios secretos españoles les comunicaron -se refiere al círculo de neofascistas italianos residentes en España en esas fechas- que oficiales de la DINA chilena deseaban proponerles el asunto a cambio de armas y dinero".

Tisei precisa que "Stéfano delle Chiae y Pier Luigi Concutelli -implicado en el asesinato del juez Occorsio- decidieron eliminar a Leighton, para lo cual se trasladaron a Roma".

Armas y dinero

El neofascista afirma que "Giulio Creszenci aportó las armas -dos Berettas del nueve corto y una Walter 6,35- y participaron en el apoyo logístico Bruno de Luia, Adriano Tilgar, Paolo Signorelli y el propio Crescenzi.Según Tisei fue el propio Concutelli quien "empleó la pistola con silenciador para disparar contra Leighton". Añade el testigo: "Recuerdo que (Conteculli) me explicó el atentado. Es la única vez que he fallado en mi vida, me dijo. Él le disparó a la cabeza a Leighton, a la frente, sin darse cuenta de que la mujer de éste se encontraba a poca distancia; la mujer empezó a aullar y entonces Concutelli se volvió y disparó contra ella. Ésta fue herida en la garganta y ambos cayeron acribillados al suelo. Concutelli se acercó para darles el tiro de gracia, pero decidió no hacerlo, al creer que estaban muertos".

Tisei añade que la DINA les había prometido una partida de armas y dinero en metálico por el atentado que posteriormente no les fueron entregados.