La OID reitera que el incidente no influirá en la suerte de los 21 saharauis de Ceuta

La Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores se remitió ayer a la nota hecha pública el sábado por este organismo, en torno al posible cambio de la situación de los 21 saharauis, que han pedido asilo político en Ceuta, después del ametrallamiento sufrido el sábado por la patrullera de la Armada Española Tagomago y el pesquero Junquito, en el que perdió la vida el cabo de 18 años José Manuel Castro. La OID señalaba en su nota que el Gobierno español "declara que los principios de la política exterior española en ese área no se verán afectados por acciones criminales de esta naturaleza".Por otra parte, al ex socio de Aministía Internacional Lucas del Valle, que acogió en su casa durante dos noches a los primeros saharauis que llegaron a Ceuta y que era una de las pocas personas que tenían acceso a los jóvenes estudiantes, le fue prohibido el sábado el pase a la residencia de ancianos Nazareth, donde se hallan recluidos, según confirmó ayer a este periódico. EL PAÍS intentó ayer ponerse en contacto con el delegado, el socialista Manuel Peláez, sin conseguirlo.

Según una información publicada ayer por el diario El Faro de Ceuta, la undécima conferencia de los comités de apoyo al pueblo saharaui, celebrada en Viena desde el pasado viernes hasta ayer, a la que han acudido representantes de distintos países, ha mostrado su solidaridad "con el valiente acto político realizado por los 21 jóvenes saharauis que han huido de la represión y ocupación marroquí de su patria". "Los comités de apoyo a la República Saharaui -continúa la nota publicada por El Faro de Ceuta- solicitan del Gobierno español acelerar los trámites administrativos para garantizar que lleguen a su destino final y se haga cargo de ellos el Gobierno saharaui, ya que su vida, de prolongarse su estancia en Ceuta, corre grave riesgo". Esta petición ha sido enviada al ministro de Asuntos Exteriores español, y en ella solicitan asimismo que "se rechace toda maniobra del Gobierno marroquí para obtener la devolución a las autoridades de aquel país, lo cual supondría, para los jóvenes, la tortura y la muerte".