Sobre la dimisión de Almirón

En respuesta a la carta de dimisión de Rodolfa Almirón Sena, ex jefe de seguridad de Manuel Fraga, nos indigna leer que su dimisión se ha debido, sólo y exclusivamente, según él, a "la campaña de difamación de un grupo períodístico". Si bien es cierto que Cambio 16 ha sido el medio propicio, no lo es menos la existencia de un denunciante, el ex inspector de la Policía Federal argentina Rodolfo Peregrino Fernández, que lo acusa, y del que el señor Almirón no hace referencia alguna. Nuestra Comisión de Solidaridad con Familiares de Detenidos-Desaparecidos en Argentina (Cosofam) ha interrogado al denunciante el que ha manifestado, entre otras cosas, que estaría dispuesto a tener un careo con el señor Almirón. Por tanto, sería muy bueno para el señor Almirón que se pronunciara sobre el particular. ¿Dónde, cómo y cuándo se pondría frente a su acusador?Por otra parte, no nos extraña a nosotros, familiares de detenidosdesaparecidos, que el señor Almirón se sienta "impedido de desarrollar su trabajo con eficacia" al privarlo de su arma. También estamos seguros de que cuando en Argentina se restablezca una verdadera justicia no tendrá necesidad de ser un chivo para expiar sus culpas.

Esperamos confiadas que no por el señor Almirón, sino a pesar de él, los tribunales españoles hagan justicia privándolo de su ciudadanía española extrañamente obtenida a pesar de sus antecedentes criminales y cuadyude a reparar el daño, no de las calumnias, sino de los reales y monstruosos hechos llevados a cabo por el señor Almirón y sus secuaces.

Sería saludable para la democracia española que se aclarara públicamente la culpabilidad del señor Almirón para que no haya dudas en presuponer su inocencia.