El ascendido general Aramburu seguirá mandando la Guardia Civil
El director de la Guardia Civil, José Luis Aramburu Topete, ha sido ascendido, en el Consejo de Ministros de ayer, al empleo de teniente general, a propuesta del ministro de Defensa. El nuevo teniente general, que ocupaba plaza en un destino de superior categoría, seguirá al frente de la citada institución.José Luis Aramburu nació en Huelva un 23 de julio, y tiene 63 años de edad cumplidos. Fue voluntario en la 13ª centuria de Falange de Sevilla al iniciarse la guerra civil. Alferez provisional de Ingenieros de la 4ª promoción de Sevilla a los diecinueve años, en 1937. Terminada la contienda pasó por la academia de transformación, donde obtuvo el número 3 de la primera promoción de Ingenieros, y salió de teniente en 1941.En 1942 ascendió a capitán; en 1945, a comandante; en 1959, a teniente coronel; en 1970, a coronel; en 1975, a general de brigada, y en 1979, a general de división.
Es diplomado de Estado Mayor y en estados mayores conjuntos, y tiene el título de especialista en cooperación aeroterrestre. Ha realizado cursos en Taiwan, Italia y Estados Unidos. Formó parte de la División Azul. Su destino inmediatamente anterior al que actualmente ocupa fue la Secretaría General para Asuntos de Política de Defensa (SEGENPOL), creada por Gutiérrez Mellado. Tiene en su haber diversas condecoraciones.
El general Aramburu Topete tornó posesión del mando de la Guardia Civil el 22 de abril de 1980. Su nombramiento venía a cubrir la vacante producida por la destitución del teniente general Pedro Fontenla. El cese fulminante de éste se produjo corno consecuencia de unas declaraciones periodísticas donde afirmaba que la institución se opondría a la aprobación de una ley considerada ambigua en torno a su carácter militar. Las declaraciones del general Aramburu con ocasión del día de la patrona en 1980 tuvieron marcado carácter polémico respecto a la Prensa. Su actuación en la jornada del 23 al 24 de febrero fue decisiva para el fracaso del golpe que se intentó.
El ascenso del general Aramburu se ha producido precisamente ayer por el criterio gubernamental de mantener la proporcionalidad respecto a la procedencia de las cuatro armas en el escalafón de los distintos empleos del generalato.
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