La forma inglesa

( ... ) La boda real no ha sido ofrecida al mundo a través de otro mar sin límites, el mar de las ondas de la televisión, como ningún otro acontecimiento desde el aterrizaje en la Luna. ¿Si no como hubiesen estado quinientos millones o tal vez 750 millones de espectadores pendientes de un solo país, de una ciudad, Londres, de la boda del año o más bien del siglo, o como dicen los americanos, el mayor espectáculo del mundo? Por un día Londres ha sido de nuevo la capital del mundo.Sin embargo, Inglaterra es el único país de la Europa de la posguerra que a pesar de todas las previsiones de catástrofes no nos transmite angustia. Nos preocupan las continuas crisis del Gobierno italiano, las elecciones francesas, los achaques de la democracia en España, las dificultades portuguesas para entrar en la época poscolonial, todo nos parece consecuencias terribles excepto en lo que llega de Inglaterra. La isla parece estar de una forma particular no sólo distante, aislada, sino también segura. Cada pueblo tiene su propia forma de tratar o acabar con sus problemas. ( ... )

Los problemas ingleses cionviven uno al lado del otro, es decir, de una forma de fábula y racional: de forma inglesa. «Viva esta forma».

29 de julio