Fraga: "Los navarros votarían «no» en el referéndum de integración a Euskadi"

El presidente de Alianza Popular, Manuel Fraga, declaró ayer, en el transcurso de una conferencia pronunciada en un hotel de Madrid, que no existe un problema navarro, sino que éste se quiere crear como una ampliación del vasco, y que, en su opinión, la solución pasa por dotar a Navarra de una autonomía plena, acabar con el terrorismo mediante la declaración del estado de excepción y, únicamente después, convocar el referéndum, «de cuyo resultado estoy convencido: los navarros votarían no a la integración en Euskadi».

Su conferencia, aplaudida por varios centenares de personas que abarrotaban la sala -entre ellas los ex ministros Ricardo de la Cierva y Garicano Goñi y un buen número de militares-, constituyó un durísimo ataque a los partidos y «teorías» que intentan convencer al pueblo navarro de la conveniencia de anexionarse al País Vasco. Para Fraga, el tema no ofrece dudas: los vascos quieren a Navarra para compensar sus estrecheces territoriales, para ampliar su frontera francesa, salvar su hundida economía a costa de la bien saneada de los navarros y, «de la misma manera que los nazis deseaban la Europa del Este, los separatistas quieren ahora convertir a Navarra en una colonia agrícola», algo así como «un pariente pobre cuya finca quieren administrar».Y para conseguir una Navarra autónoma y fuerte el señor Fraga pidió una actuación enérgica por parte del Gobierno de Madrid, ya que «el Gobierno que entregue a Navarra será reo de alta traición, de cuya condena ningún compromiso o pretexto le podrá librar jamás». También se mostró muy indignado el líder aliancista con los «pactos o componendas que a espaldas del pueblo navarro se pudieran estar realizando». En este sentido, en una conferencia de Prensa previa a su discurso, Manuel Fraga rechazó de plano la posible creación de un Parlamento conjunto entre Euskadi y Navarra, proyecto que, según pudo saber EL PAÍS, se estaría negociando entre PNV, PSOE y UCD en Madrid, a propuesta del socialista Txiki Benegas. Tal proyecto sería una interpretación ampliada del artículo 122 del Estatuto vasco, según el cual se podría creár una institución de encuentro entre los dos territorios para administrar los servicios e intereses económicos comunes.