Hay que hablar de negocios con Carter

( ... ) España está especialmente interesada en las relaciones bilaterales, con un tratado que finaliza dentro de un año y que, denunciado o mejorado -no hay otra alternativa-, va a tener repercusión en el planteamiento de la política exterior española, auténticamente acosada por problemas urgen, tes y numerosos, (...)Por otrá parte, planteado con, decisión por el Gobierno y recibido con acritud por la oposición, el tema de nuestra incorporación al Tratado del Atlántico Norte (OTAN) pesa firmemente sobre las negociaciones hispano-norteamericanas, hasta el punto de condicionarlas. Ya sabemos que Estados Unidos nos vería con buenos ojos en la OTAN, pero no podemos dar ese paso sin un ciaro.apoyo norteamericano en temas como Gibraltar, relaciones con el Magreb (que tienen que recibir un tratamiento distinto si España se decide a integrarse en la defensa europea), aspiraciones al Mercado Común, lazos diplomáticos con Israel (sin perjudicar nuestra tradicional amistad con los árabes), conferencia de cooperación y seguridad (cuyo éxito depende, en gran parte, de la actitud norteamencanal que seguramente, y dadas las fechas electorales, tenderá a ser dura) y problemas comerciales de gran importancia para España, con una balanza deficitaria con Estados Unidos del orden de los 80.000 millones de pesetas.(... )

25 de junio