Numerosas visitas del alcalde a distintos puntos de la ciudad

Enrique Tierno, alcalde de Madrid ha decidido, según parece, aprovechar el primer verano de su mandato municipal para realizar visitas a distintas zonas de la ciudad, inaugurar actos culturales o supervisar trabajos y servicios realizados por empleados de la Corporación. En los últimos días el señor Tierno ha sido visto lo mismo repartiendo churros en la verbena de la Paloma que en la inauguración del museo itinerante de Salvador Allende en el patio de coches del palacio de La Granja de San Ildefonso, en Segovia; o en diversos mercados, dedicado a la recogida de observaciones de las amas de casa sobre cómo se podrían mejorar las instalaciones y el abastecimiento.Si la inauguración del citado museo itinerante a la que asistió el pasado lunes en unión de los alcaldes de La Granja, Erick Clavería, y de San Lorenzo, Francisco Fernández Maganto, le sirvió para alabar el acercamiento de la cultura al pueblo, sus visitas,tanto diurnas como nocturnas, por las calles madrileñas le han servido al señor Tierno para enterarse del ruido que tienen que aguantar los vecinos de algunas calles cuando se realiza la recogida de basuras o de qué es lo que falta en algunas zonas que cuentan entre su infraestructura comercial con un mercado municipal. El alcalde visitó en este sentido diversos barrios periféricos.

Como continuación de estas visitas,se tiene prevista para esta semana una supervisiónpor parte del alcalde y de algunos de los concejales que no se encuentran de vacaciones, de la operación asfalto de este año, para ver cómo se encuentran los trabajos realizados hasta el momento.

Por otra parte, y según anunció el gabinete de prensa del Ayuntamiento, el alcalde llegó a un acuerdo con la empresa de la plaza de toros Monumental para que unos doscientos ancianos puedan asistir gratis a la Antología de la zarzuela, que comenzó ayer y que terminará el próximo día 31 de agosto. Los ancianos tendrán que presentar cualquier documento en el que conste que su titular tiene más de 65 años en las taquillas de la plaza para poder retirar la entrada; en caso que el número de plazas fuera rebasado, la información municipal facilitada hace constar que el Ayuntamiento intentaría conseguir más.