Silencio en Moscú

La visita que efectúa a Rumania el presidente chino, Hua Kuo-feng, no ha sido anunciada por la prensa soviética y hasta ahora no ha sido objeto de comentario alguno por parte de Moscú, informa la agencia France Presse. La presencia en Bucarest del máximo dirigente chino contribuye a reforzar el temor soviético de «cerco», tema principal de la política exterior soviética, comentado ampliamente por la prensa.

A principios de este mes el presidente rumano se pronunció en favor de la «normalización» de las relaciones entre los partidos comunistas figurando, principalmente, el de China. Ceaucescu comentó que las buenas relaciones que mantiene Bucarest con Pekín «no se oponen a las relaciones de amistad y de cooperación de Rumania con la URSS».

Ceaucescu, como los otros jefes partidos comunistas del bloque socialista, efectuó el 7 de agosto último la tradicional visita estival a Leónidas Brejnev, en Crimea.

Según opinan algunos observadores, el presidente soviético pudo hacer a su colega rumano algunas «recomendaciones» con el fin de evitar que la visita de Hua Kuo-feng se transforme, en una provocación auténtica a Moscú.