Cascallana, del Marcol al Calpisa

Avanza el mes de agosto y también continúa el ritmo sostenido de fichajes en los distintos deportes. El que se lleva la palma una vez más, quizá porque para algo es el que más licencias acoge, es el balonmano.La noticia ya confirmada e importante es que Miguel Angel Cascallana, alero internacional, ha dejado una vez más el Marcol y en esta ocasión para pasar al Calpisa. Aunque no se han dado cifras sobre su traspaso -natural y lógico-, olvidémonos de amateurismos y digamos que los números deben ser muy altos. El contrato por dos años debe rondar el millón de pesetas, si no lo supera.

El paso de Cascallana al doble campeón de España tiene una fácil explicación: sustituir a Víctor Lafuente, que a su vez, en ese trasiego curioso que se forma, se ha enrolado en el Barcelona. En resumidas cuentas vuelve a su ciudad. El alero no ha sido, por otra parte, el único fichaje del club azulgrana, que está decidido a no dejarse postergar más por Calpisa y Atlético de Madrid. El máximo goleador de la Liga, Juan López, al descender a Primera División el Gavá, jugará la próxima temporada con el Barcelona.

En cuanto al baloncesto, la noticia no deja de tener su intríngulis. Pepa Calvet, una de las mejores base que tiene el deporte de la canasta español, en su parcela femenina, ha dejado su Medina Lérida, donde estaba más que aislada, aisladísima. Nos parece muy bien. Lo que resulta extraño es que ningún equipo catalán se haya interesado por ella y nada menos que haya sido el Celta de Vigo el equipo en el que formará la próxima temporada. A sus 20 años, con 1,67 metros de estatura, internacional junior y senior, Pepa Calvet ha hecho un largo cambio, no cabe duda. Suponemos que también rentable, claro.