Zidane se estrena con derrota

En pantalón corto, casi siempre de pie, y con más gestos que expresiones verbales, Zinedine Zidane se estrenó como entrenador del Castilla. Lo hizo con derrota (2-1) en el miniderbi madrileño que enfrentaba al filial madridista con con el Atlético de Madrid B.

La presencia de Zidane en El Cerro del Espino de Majadahonda convocó a un gran número de medios de comunicación, muchos de ellos franceses. Había mucha expectación por ver el estreno de Zizou, que decidió abandonar los despachos del Bernabéu para ser ayudante de Carlo Ancelotti durante la temporada pasada.

Sin el título aún que le acredite como primer entrenador, en el acta del partido figuraba como segundo. Para eludir el reglamento, figuraba como técnico Santiago Sánchez.

Jugado bajo un sol justiciero, Zidane empezó a inquietarse con la facilidad que la que el extremo derecho rojiblanco Iván Alejo superaba a su defensa. La canícula hizo que optara por protegerse con una gorra, que ajustaba y desajustaba con frecuencia. Cuando Raúl de Tomás adelantó a su equipo, celebró el gol con normalidad. La remontada del Atlético, con goles de Aquino y Keita, la digirió con inquietud. Protestó alguna decisión del colegiado con gestos, pero cuando este señaló el final del encuentro fue a estrecharle la mano a Óscar Mena, entrenador del Atlético B, y se fue cabizbajo hacia los vestuarios.