Federer llama, Djokovic responde

Djokovic sigue apabullando. 24 horas después de haber despachado al argentino Del Potro, ha pasado por encima del francés Gasquet en tres mangas (6-4; 6-4 y 6-2) y llega a cuartos sumando su 43º victoria seguida, 41ª en 2011. Superada la racha de McEnroe, al que puede arrebatarle el mejor arranque de temporada llegando a semifinales, y muy cerca del record absoluto del argentino Vilas (46).

Gasquet se había presentado a esta cita con legítimas pretensiones, después de ganar al brasileño Bellucci en la ronda anterior. Sin embargo, cualquier tenista empequeñece frente al estado de gracia y al rigor mental de Djokovic, que juega cada punto como si fuera el decisivo. De vez en cuando, destellos de la clase del francés salían a flote, como una soberbia volea de espaldas a principios de la tercera manga que encandiló a los asistentes. Pero la superioridad del serbio (34 golpes ganadores contra 16) mortificó cualquier arrebato de Gasquet. El galo regaló el primer break del último parcial con una doble falta, demostrando como la fortaleza del serbio debilita cualquier rival se ponga delante de su marcha triunfal. De momento, no tiene oposición.

El partido de Djokovic duró justo un minuto más del de Roger Federer. El suizo, acompasado y sin prácticamente desgaste físico, ha solventado sin apuros el duelo ante su compatriota y amigo Stanislas Wawrinka en tres mangas (6-3; 6-2 y 7-5), en apenas 1h46m. Un paso firme en la tierra de Roland Garros, escenario resbaladizo para él hasta 2009, cuando se hizo con el único grande que le faltaba.

Wawrinka no supo confirmar las buenas impresiones sembradas hace dos días, cuando eliminó a Jo-Wilfried Tsonga. Estuvo muy flojo en las dos primeras mangas, lo que permitió a Federer controlar el duelo sin problemas y lucir de vez en cuando golpes ganadores con su maravilloso revés. El único momento difícil para el número tres del mundo fue durante el tercer parcial, cuando Wawrinka consiguió una rotura y se puso 4-1. Sin embargo, Federer no se descompuso y se adjudicó seis de los sucesivos siete puntos, manteniendo inmaculado su historial en esta edición de Roland Garros, donde aún no ha cedido un solo set.

En cuartos de final le espera el ganador del duelo entre Ferrer y el francés Monfils, previsto para esta tarde. El último obstáculo antes de una probable -y estelar- semifinal ante la apisonadora Djokovic, al que le aguarda el italiano Fognini.